Creatividad romántica, incrementar la creatividad en parejas.

Cómo ser más creativos en las relaciones de pareja, jeje! Es broma. No voy a escribir cómo ser más creativos en las relaciones de pareja, aunque seguramente algo se puede aprovechar de este post para ello. En este post hablaré de la creatividad trabajada en pareja, pueden ser enamorados o no, es solo un título “transgresor” más para llamar la atención! 😉pareja-feliz

A día de hoy, el pensamiento en solitario es todavía esencial, el poder inventivo del individuo es aún el corazón del organismo inventivo. Todos conocemos a personas que por su temperamento precisan de soledad para un mejor trabajo de creación (a mi me pasa). Pero la verdad, es que, la mayoría de individuos pueden conseguir un mayor resultado creador si se asocian con la persona adecuada (y un buen método), porque la colaboración tiende a acelerar el esfuerzo y también a impulsar el poder instintivo de asociación que cada individuo posee. A modo individual, debemos dejar por sentado un principio, y es que, nuestro torrente de ideas debe ser estimulado por todas las influencias a nuestro alcance y trabajar en pareja es una de ellas.

Compañeros que congenian trabajando con un mismo espíritu al mismo tiempo que se distraen, que puede parecer algo malo de primeras, pueden contagiarse mutuamente la creatividad, de forma que la de uno haga superarse a la del otro. Y la crítica desde el “compadreo” es un buen incentivo, por qué generalmente es espontánea.

La imaginación sin juicio es peor que lo creado con juicio sin imaginación. Por ello es interesante conocer técnicas sobre el proceso creativo y aplicar juicio e imaginación  a su debido tiempo.

Pero no todo va a ser de color de rosa! Se advierte peligro en el trabajo en pareja! Por ejemplo, uno de ellos puede anular el poder creador del otro. Un “jefe”, que no suele aceptar los errores, trabajando en pareja con un empleado, el empleado tenderá a encontrar respuestas muy en línea con las de su jefe, o más le vale! O en un par de compañeros, si uno de ellos tiene fe en su socio, es fácil que su instinto le diga. “no hay razón para esforzarse demasiado, él pensará en la respuesta”. (eso es trampa! y se me ocurre para evitarlo, una pura competición, quién aporte más cantidad de ideas, por ejemplo, sea invitado por el otro a comer después de la sesión, ¿hay reto?)

Ante todo, en parejas y/o en equipos , si lo que estamos buscando son soluciones, debemos abstenernos a cualquier discusión, que casi siempre suele ser destructora.

Como es natural, para iniciar cualquier tipo de tarea en equipo es indispensable asociarse con alguien en estrecha colaboración. Ser conscientes de cuál es el objetivo, y sin duda, que sea un objetivo compartido, que ambos estén interesados en el éxito de éste.

Para conseguir un máximo de creatividad en el trabajo en equipo, cada socio debe dedicar cierto tiempo a la meditación en solitario, porque está comprobado que trabajando juntos, después solos y de nuevo juntos, dos pensadores tienen mayor probabilidad de encontrar lo que buscan, que trabajando en todo momento juntos de forma contínua.

Yo propongo esta metodología, muy abreviada, para la consecución con más garantías para resolver problemas creativos:

  • ¿Cuál es el problema? – Juntos – Esta será la primera sesión para trabajar conjuntamente, hablar de manera distendida sobre el problema a resolver, recogiendo notas de lo que vaya surgiendo de la conversación, hay que practicar la escucha activa, no pretender tener la razón desde el principio, si no divagar lo máximo posible. (Es un momento de divergencia)
  • Meditación sobre el problema – Separados – Ahora es momento de pensar sin interrupciones y reflexionar de cuáles son las raíces del problema, los diferentes puntos de vista y cerrar unas conclusiones de las que cada uno tiene que estar satisfecho.
  • Compartimos reflexiones – Juntos – Se comparten las reflexiones realizadas sobre el problema en solitario, seguramente se coincida en muchas conclusiones, lo cuál es bueno, porque demuestra, quizás, que se están enfocando adecuadamente a las raíces verdaderas del problema, en este punto hay que ser muy asertivos y considerar la novedad (vaya! no me había dado cuenta de esto!) En este punto debemos tener claro que hay que solucionar.
  • En búsqueda de soluciones – Separados – Sin dejarse influenciar por el compañero, buscamos soluciones a los problemas. Partiendo de ideas locas, suspendiendo el juicio y centrándose en la cantidad (es el momento dónde te puedes estar jugando una comida con tu socio).
  • Compartamos las soluciones – Juntos – Y finalmente, después de este proceso, tenemos una larga lista de soluciones a un problema consensuado, y garantizo, que más soluciones que si hubiéramos trabajado en solitario todo el proceso. Ahora es momento de valorar las soluciones de ambos, haciendo un ranking, por ejemplo, de las soluciones según lo novedosas que sean la soluciones, lo bien que resuelven el problema, osea, su utilidad y factibilidad de la solución.

Se deduce que dos cerebros obtienen mejores resultados en colaboración en cuanto a juicio se refiere, pero pueden inhibirse entre si en el campo de la creatividad. Procuraremos por todos los medios que el juicio o crítica no inhiba la imaginación ni la creatividad, el juicio se debe aplicar en el momento concreto y necesario del proceso creativo, no hacerlo así, podría provocar la pérdida de ideas que quizás, nos podrían haber dado resultados muy provechosos.

Creative technologist, Thinker & Big Things Developer. Sometimes Artist.

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